Salir a cenar es una oportunidad para pasar tiempo con nuestra pareja, con nuestros amigos, para tener una conversación interesante y ponernos al día con esa persona a la que por desgracia no podemos ver tan a menudo como quisiéramos. Pero también puede ser una ocasión perfecta para vivir una experiencia diferente y divertida, a través de las cenas espectáculo, que cada vez son más comunes en las grandes ciudades y ofrecen todo lo mejor de una cena deliciosa con el extra de un buen espectáculo de danza, música o incluso teatro.
Son locales que buscan ofrecer algo distinto, diferente a lo que suele ser habitual en la gran mayoría de restaurantes. Y es que ya hay muchos restaurantes donde simplemente te sirven la comida y ya está. Sin embargo, en las cenas con espectáculo pagas no solo por lo que comes, sino también por un concierto, por una pieza de teatro o incluso de danza. Es como disfrutar de una noche completa en el mismo lugar, y en un tiempo mucho más reducido, lo que ahorrará tanto desplazamientos como horas de sueño a los que se animen a probarlo.
Oportunidad única de degustar comida mientras disfrutas de música
Las cenas con espectáculo musical son sin duda la atracción favorita dentro de este sector, ye s que eso de probar a disfrutar de una buena hamburguesa, un filete exquisito, una ensalada deliciosa o algo de pescado mientras también nos deleitamos con un grupo tocando en directo, es una experiencia que todo el que la prueba repite. Suelen ser conciertos bastante más tranquilos, por supuesto, porque al final y al cabo se trata de ambientar la velada. Todo el mundo está sentado, todo el mundo escucha lo que suena y disfruta de la comida. El ambiente es magnífico y además, hay cenas de este tipo para todos los gustos musicales.
Anímate a observar una pieza de baile durante la cena
El baile también es una disciplina que se puede disfrutar mientras se cena, sobre todo el flamenco. Y es que no es extraño encontrar en muchas ciudades españolas los típicos tablaos flamencos donde un par de cantaores se unen a un par de buenos guitarristas y forman una auténtica fiesta, mientras un grupo de baile danza sobre los sones que cantan y tocan. También podemos cenar mientras contemplamos un poco de danza contemporánea, que es mucho más relajada y seguro que nos hará sentir cosas muy especiales mientras devoramos la comida que tenemos en el plato.
Shows de magia que deleitan a los comensales
Y si no has tenido suficiente con la música y la danza, ¿qué tal un poco de magia para acompañar la cena? Son muchos los locales que también aprovechan para colocar estetipo de espectáculos a la hora de la cena, espectáculos en los que el comensal verá cosas increíbles y dudará incluso de que todo sea real. Hay espectáculos en los que se pedirá también a participación de algún comensal voluntario para un truco, así que podemos convertirnos incluso en ayudantes de un mago por unos momentos, todo ello mientras llenamos el estómago con comida realmente exquisita que nos sabrá a gloria. El precio no suele ser demasiado elevado, y casi están pagando dos cosas por una.
Combina cena y humor con un espectáculo de improvisación
Otro de los espectáculos que más se llevan con las cenas últimamente son los monólogos, en los que se combina el humor y la improvisación para realizar un discurso humorístico lleno de chistes y referencias que seguro que harán disfrutar a los comensales. Si te gusta reírte (¿y a quién no?) y cenar al mismo tiempo, si sueles ponerte esos programas de comedia mientras estás cenando en casa, no puedes perderte esta experiencia en vivo y en directo, con algún cómico de renombre haciéndote reír a carcajadas mientras te terminas tu plato. Eso sí, mucho cuidado con atragantarte con tanta risa.
Obras de teatro cortas que harán de tu cena una experiencia única
Si te gusta el teatro y la interpretación, también hay opción de acudir a una cena con espectáculo de microteatro, en el que disfrutarás de pequeñas obras normalmente con mucho de improvisación en ellas, en un espectáculo repleto de intensidad y de diversión. En ocasiones las obras son dramáticas, pero lo más usual es que tiendan a la comedia, como pequeños sketches que hagan reír a los comensales mientras disfrutan de su comida. Las hay para todos los gustos, y en algunos locales incluso se combinan todas esas artes para ofrecer, por ejemplo, una pequeña obra musical en la que se cante, se baile y se interprete, para dejar a gusto a todo el amante de la cultura.